El estilo del evangelizador
“Dar testimonio y a anunciar el mensaje cristiano conformándose a
Jesucristo”: es este “el estilo del evangelizador” que indicó Benedicto
XVI en la homilía de la misa celebrada en la plaza de San Pedro el
domingo 21 de octubre por la mañana, al término del rito durante el cual
fueron proclamados siete nuevos santos. Tres hombres y cuatro mujeres,
religiosos y laicos, de los cinco continentes: modelos de santidad para
una Iglesia que, con el Año de la fe, a los cincuenta años del Concilio
Vaticano II, quiere renovar el anuncio del Evangelio a los hombres de su
tiempo y busca, en tales modelos de vida, inspiración y apoyo. Una
indicación importante a una semana de la conclusión del Sínodo sobre la
nueva evangelización y en el día en que se celebra la Jornada misionera
mundial.
En su homilía el Papa propuso los elementos más significativos de la
vida de cada uno de los nuevos santos subrayando qué hace actual su
testimonio de fe.
Casi queriendo poner el acento sobre la constante referencia a la
santidad en muchas intervenciones de los padres sinodales estos días, el
Pontífice recordó que en la Iglesia esta vocación universal “tiene
siempre su fuente en el misterio de la Redención”. Por este motivo la
canonización celebrada “constituye una elocuente confirmación de esta
misteriosa realidad salvadora”. Y “esto vale tanto para la misión ad gentes
como para la nueva evangelización en las regiones de antigua tradición
cristiana”. Por lo demás, “estos nuevos santos, diferentes por origen,
lengua, nación y condición social, están unidos con todo el Pueblo de
Dios en el misterio de la salvación de Cristo, el Redentor”, recalcó.
Al final de la misa, el Pontífice rezó la oración del Ángelus con los
fieles reunidos en la plaza, invitándoles a dirigirse a “quien es Reina
de todos los santos, la Virgen María”.
Benedicto XVI quiso además dirigir su pensamiento a Lourdes, que
sufre un grave desbordamiento del Gave y la inundación de la gruta de
las apariciones de la Virgen. Y refiriéndose a la celebración de la
Jornada misionera mundial, encomendó a la materna protección de la
Virgen “a los misioneros y misioneras, sacerdotes, religiosos y laicos
que en toda parte del mundo esparcen la buena semilla del Evangelio”.
Los nuevos santos —explicó— “nos introducen hoy en la semana misionera”;
“de modo especial sostendremos espiritual y materialmente a quienes
anuncian a Cristo en los distintos continentes”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario